OOOUUUIIIIIIÍ OOOUUUIIIIIIÍ OOOUUUIIIIIIÍ (https://www.youtube.com/watch?v=xtg7HwnBvmc ) sonaba la alarma de un móvil en una mesa de noche repleta de colillas de cigarrillos, vasos con culines de ron, whisky, champagne, todo bajo una capa de polvo blanco que había en todo el ambiente, era el final de un fin de semana más de Salustiano en un apartamento de 135 E Gorhanm St, Madison en Wisconsin, eran las 9 a.m. del Lunes 6 de abril del 2015, Salustiano despierta desasiéndose de una larga pierna blanca con medias de rejilla que tenía sobre si, era una de las 3 de las putillas que solía contratar para sus compañeros del Wisconsin School of Business para amenizar sus noches alejado de su familia de San Benito, de uno de los cajones de su habitación saca 3.000 dólares, hace canutos de mil dólares cada uno y empieza a meterlos por la vagina de la rubias de pechos perfectos, era su típica forma de despertarlas para que se vayan a su casa, una de ellas aún con ganas de más marcha empieza a sobarle los huevos, Salus mira el móvil y aún queda 40 minutos para estar en clase, le coge de la larga cabellera y la coloca frente a su polla empezando una felación como colofón final de la juerga, la rubia era una maestra de la succión con un movimiento de lengua espectacular que hacia correr a cualquiera a los minutos, de pronto empieza a vibrar el móvil que sujetaba sonando “yo quiero una salchipapa” ( https://www.youtube.com/watch?v=o2wt7tAUnZw ) cuando se disponía a hacer una foto a la rubia que le miraba estando este sus piernas y con la boca llena, -mierda, mi padre, bueno aprovecho para que envíe dinero para el Ford GT que ví ayer, Hola papá, justo ahora estaba pensando en vosotros que los hecho de men….- su padre le corto con un sonoro –Salus, tienes que venir a San Benito urgente, necesito que estés aquí que tienes que encargarte de mis negocios y cuidar de tu madre- la voz agitada de su padre con sonido de disparos de fondo hicieron que a Salus se le corte la corrida en la boca de la rubia, -hijo, escúcheme bien, usted sabe lo que le quiero mi chavo, pero con tanto pedo para cagar aguado, lo necesito aquí porque confió en usted mi chavo, tengo que cortar que no puedo hablar mucho tiempo, cuando llegue a San Benito le buscaran y le traerán a mí- ¿pero qué pasa güey? fue lo único que pudo decir Salus a su padre. Fue a coger el dinero que le quedaba, 15 mil dólares le quedaban de los 50 mil que le enviaba su padre todos los meses en un sobre usando a uno de sus hombres de confianza.
Se duchó a toda prisa, cogió un par de bóxer, polos, pantalones y se dirigió al aeropuerto de Madison el primer vuelo salía a las 6 de la tarde y no llegaría a México DF a la media noche, sentía que no podía esperar más, temía por su padre y sobre todo su madre, después de que recibiera una nota en el buzón donde le decían que disfrutara de la vida porque iba ser igual de corta que la de su padre, nota que no le dio importancia ya que los sobres de 50 mil de los grandes llegaban con puntualidad los 25 de cada mes. Contrato un vuelo privado a Chicago Midway Airsport para luego coger un vuelo vía Volaris desde el aeropuerto Chicago O'Hare International a las 14:20 horas, mientras esperaba llamó a su contacto Mexico DF para que le lleve en avión privado desde un aeródromo a las afueras de DF hasta una pista clandestina cerca de San Benito.
Mientras se encontraba en la privacidad que brinda los 10 mil pies de altura en la cabina del Cessna 172 con aquel antiguo piloto que empezó con su padre hace ya 20 años en los primeros vuelos de cocaína que construyeron el impero del padre de Salustiano, le puso al tanto que la DEA ya llevaba varios años detrás de su padre y que buscaba enfrentarlo con otros carteles mexicanos y colombianos, y además tenía noticias de que los americanos habían empezado a montar una base a las afueras del San Benito a petición del alcalde como ayuda para pacificar el pueblo, ya que cada día morían en San Benito tanto narcos como civiles por los enfrentamientos por el control del paso de la droga. Salus prefería escuchar y centrarse en sus pensamientos, de lo que le podría esperar al bajarse de dicha avioneta, no sabía si coger a su madre y regresar con ella en esa misma avioneta y abandonar toda esa vida y empezar de nuevo con el dinero que tuviera su padre escondido en cuentas en el extranjero, pero también empezaba a buscar en su memoria a sus amigos de San Benito, aquellos que en la infancia jugaban a la pelota en la plaza del pueblo, muchas de sus cabezas acabaron en sacos de yute enviados a sus madres como punto final a sus prometedoras ganancias como narcos.
La avioneta se perfila para iniciar el aterrizaje sobre una pista indicada con latas de brea encendidas, y vuelve a sonar el móvil, era la madre de Salus, con el ruido del viento y del motor del Cessna apenas logra entender que hay un grupo de hombres encapuchados que están entrando a la casa y que van a por ella, le dice que le quiere mucho y que no vuelva a San Benito y que se quede en EEUU e inicie una nueva vida. La llamada se cortó justo cuando las ruedas de la avioneta tocaron suelo y con el sonido de la precaria pista de aterrizaje era imposible escuchar nada y dio por perdida la llamada.
La avioneta se perfila para iniciar el aterrizaje sobre una pista indicada con latas de brea encendidas, y vuelve a sonar el móvil, era la madre de Salus, con el ruido del viento y del motor del Cessna apenas logra entender que hay un grupo de hombres encapuchados que están entrando a la casa y que van a por ella, le dice que le quiere mucho y que no vuelva a San Benito y que se quede en EEUU e inicie una nueva vida. La llamada se cortó justo cuando las ruedas de la avioneta tocaron suelo y con el sonido de la precaria pista de aterrizaje era imposible escuchar nada y dio por perdida la llamada.
Al final de la pista le esperaba una moto, sube a ella con su mochila a la espalda y ve como la avioneta despega y se aleja, Salus mira alrededor, mira el móvil por si su madre ha vuelto a llamar, intenta llamarla pero no daba señal de llamada, empieza a sentir angustia sin saber adónde ir, era cerca de una de la mañana, de pronto aparece un hombre alto y delgado, era el tirillas de Roberto, uno de sus amigos de la infancia que se había convertido en uno de los hombre de confianza de su padre, se saludan y este le pone al día, llevaban dos días escondiéndose y huyendo de un grupo de que no identifican quienes son, creen que son colombianos pero están seguros que tienen apoyo de la DEA ya que cada vez que su padre usaba el móvil eran casi de inmediato localizados y atacados, el padre de Salus logró escapar de la última acometida con apenas 4 de sus hombres y estaban en ocultos en una gruta de un valle, pero estaba herido y perdía mucha sangre. Emprendieron el camino en las enduro, iban con las luces apagadas y a baja velocidad puesto que temían ser localizados, la experiencia del transporte de la drogas de noche por medio del campo la tenía Roberto, pero a Salus se le hacía muy difícil llevar la moto en dichas condiciones con los mosquito metiéndose en los ojos y la boca, de pronto Roberto detiene la marcha y baja de la moto, camina hacia un pedrisco y dice -la madre de la chingada, el bigotes no está- eran cerca de las 7 de la mañana y estaba a punto de amanecer, Roberto le dice a Salus que es mejor dejar las motos y bajar al valle a pie aprovechando que aún queda media hora de oscuridad, temiendo una emboscada, llegan a la gruta y ahí solo había silencio y oscuridad, de pronto Salus enciende la linterna de su iphone 6 y ve a su padre tendido boca abajo en una esquina con un charco de sangre y ni rastro de los otros 3 hombres de confianza, ni de las armas ni de la maleta con dinero que llevaba durante la huida, Salus se derrumbó a llorar al lado de su padre, Roberto se mantenía en silencio contemplado a su amigo de la infancia mientras sostenía su fusil Ruso VSS Vintorez.
Después de cubrir el cuerpo con piedras en el fondo de la gruta, Salus le promete a su padre la venganza y a cualquier precio, pero antes tiene que encontrar a su madre, cuidar de ella y piensa que lo mejor en llevarla a EEUU con el dinero que pueda rescatar de la fortuna de su padre y todo el dinero que pudiera tener escondido con testaferros por todo el país. Roberto le explica que en el pueblo se ha asentado una banda de narcos colombianos que eran los últimos con los que había hecho negocio su padre y son sospechosos de lo acontecido, sin embargo la localización de las llamadas que realizó su padre colocan a la DEA en el punto de mira de la venganza de Salus. Roberto le recuerda que si han localizado las llamadas de su padre, es muy probable que también sepan por las conversaciones que Salus esta en San Benito y es probable que los mismos que asesinaron a su padre y raptaron a su madre, lo estén buscando.
Salus pregunta a Roberto si su padre tenia armas escondidas y le pide que vaya por ellas y que las cambie de lugar para evitar que los otros tres desertores las roben. Roberto le juró lealtad como en los viejos tiempos, cuando niños hacían travesuras y Roberto nunca delató a Salus. Quedaron en encontrarse en el pueblo por la tarde, a Salus le quedaban algo mas de 7 mil dólares, le dio cerca de mil a Roberto y ambos subieron a las motos y marcharon.
Después de 3 horas de viaje por moto, Salus ve desde una colina el pueblo donde nació, crió y paso toda su vida antes de ir a estudiar a los "yunaites", escondió la moto y su mochila, solo llevaba el dinero y su DNI escondido, por el camino encontró tirado un borrado, le desnudo y le robo la ropa, y llego al pueblo con la confianza de que un poncho y un sombrero le darían la garantía de pasar desapercibido como un campesino alcohólico........ continuará
Después de cubrir el cuerpo con piedras en el fondo de la gruta, Salus le promete a su padre la venganza y a cualquier precio, pero antes tiene que encontrar a su madre, cuidar de ella y piensa que lo mejor en llevarla a EEUU con el dinero que pueda rescatar de la fortuna de su padre y todo el dinero que pudiera tener escondido con testaferros por todo el país. Roberto le explica que en el pueblo se ha asentado una banda de narcos colombianos que eran los últimos con los que había hecho negocio su padre y son sospechosos de lo acontecido, sin embargo la localización de las llamadas que realizó su padre colocan a la DEA en el punto de mira de la venganza de Salus. Roberto le recuerda que si han localizado las llamadas de su padre, es muy probable que también sepan por las conversaciones que Salus esta en San Benito y es probable que los mismos que asesinaron a su padre y raptaron a su madre, lo estén buscando.
Salus pregunta a Roberto si su padre tenia armas escondidas y le pide que vaya por ellas y que las cambie de lugar para evitar que los otros tres desertores las roben. Roberto le juró lealtad como en los viejos tiempos, cuando niños hacían travesuras y Roberto nunca delató a Salus. Quedaron en encontrarse en el pueblo por la tarde, a Salus le quedaban algo mas de 7 mil dólares, le dio cerca de mil a Roberto y ambos subieron a las motos y marcharon.
Después de 3 horas de viaje por moto, Salus ve desde una colina el pueblo donde nació, crió y paso toda su vida antes de ir a estudiar a los "yunaites", escondió la moto y su mochila, solo llevaba el dinero y su DNI escondido, por el camino encontró tirado un borrado, le desnudo y le robo la ropa, y llego al pueblo con la confianza de que un poncho y un sombrero le darían la garantía de pasar desapercibido como un campesino alcohólico........ continuará
San Benito a lo lejos
